No sé porque te intento hablar con el aroma de los montes,
sellando alguna cita infiel con las montañas.
Ya no te desnudas como antes,
piel de toro bravo, y manos de lirio.....
me antoja tanta locura tus rizos
que me encandilo.
adornan tu viril rostro.
tus sienes de húmedo vértigo.
Ya no te desnudas como antes,
donde tus brazos como mecedoras
me asían como carbón encendido muchas veces.
No te mintiera si huelo a ti,
casi todo el tiempo que duran mis noches.
Mis dedos tocan tu cuerpo como guitarra encantada,
gimiendo entre mis piernas
de mi alma enamorada.
Haciendo el amor ,oliendo a monte y lluvia
debajo del dolor encima de mi dicha.
Ya no te desnudas como antes,
pero mi piel anuncia el roce de tus ansias
nadie puede robarme esa sagrada entrega
aunque la hayas amado
en tu carroza dorada,
Las cosas nuestras persisten....
rompiendo el mármol mas frío,
arañando las distancias.
Ya no te desnudas como antes amor,
no hay telas,no hay ramilletes
solo Yo, palpando tu alma.
sellando alguna cita infiel con las montañas.
Ya no te desnudas como antes,
piel de toro bravo, y manos de lirio.....
me antoja tanta locura tus rizos
que me encandilo.
adornan tu viril rostro.
tus sienes de húmedo vértigo.
Ya no te desnudas como antes,
donde tus brazos como mecedoras
me asían como carbón encendido muchas veces.
No te mintiera si huelo a ti,
casi todo el tiempo que duran mis noches.
Mis dedos tocan tu cuerpo como guitarra encantada,
gimiendo entre mis piernas
de mi alma enamorada.
Haciendo el amor ,oliendo a monte y lluvia
debajo del dolor encima de mi dicha.
Ya no te desnudas como antes,
pero mi piel anuncia el roce de tus ansias
nadie puede robarme esa sagrada entrega
aunque la hayas amado
en tu carroza dorada,
Las cosas nuestras persisten....
rompiendo el mármol mas frío,
arañando las distancias.
Ya no te desnudas como antes amor,
no hay telas,no hay ramilletes
solo Yo, palpando tu alma.