Te conocí en mis lamentos,
vibrando del arco irís
de sangre hiciste una rosa,
de lágrimas muchos besos
mi corazón de poeta
anduvo por muchos lares
pero te sigo diciendo
que cambiaste mis lugares.
No sé si tu amor hermoso
ha sido mi esclavitud
pero leyendo a los sabios,
dicen ellos,que no hay nada
que no conlleve a eslabones.
El amor es un tirano
que no admite competencias
esa verdad no me agrada,
es la carne y la pasión
envueltas en la emoción
lo que perdura en la unión
la química de los besos,
la entrega desde la piel.

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